Me llama la atención la aparición de nuevos sistemas de pago online que garantizan (hasta que se demuestre lo contrario) la seguridad contra un uso fraudulento de nuestras tarjetas de crédito. Así entidades como LA CAIXA ofrecen tarjetas de crédito para uso exclusivo en Internet en las que se puede tener un pequeño capital únicamente para nuestras compras virtuales. Así, ante un posible fallo de seguridad (nuestro, de nuestro terminal, de nuestro router, del proveedor de internet) el capital sustraido sería como máximo de la cantidad asignada a debito en nuestra tarjeta de cartón.
Otros bancos en el momento de validación de la compra llaman al teléfono móvil del titular mediante un sistema automatizado de voz que nos pide la confirmación de la compra con un código de seguridad.
Otra novedosa opción en el sistema de pago Ukash en la que usuario compra unos cupones, a modo de tarjeta de prepago, introduce los códigos de la misma y realiza su compra. Esta tarjeta según cuentan en la web se puede adquirir en más de 6500 establecimientos adheridos.
Este tipo de sistemas demuestran un impulso en las compras en internet, con los mínimos de seguridad exigibles, en nuestro pais que sigue un poco aletargado respecto a la mayoría de los paises comunitarios.
